Navideath

Hace tiempo que la Navidad dejó de ser un acontecimiento importante y esperado cada año. Lo único que la mantiene viva es la existencia de mi pequeña hija, quien la espera con ingenua expectación. Hoy, sin ella a mi lado, esta festividad carece de cualquier sentido.

Mi intención no es ser; ni mucho menos parecer, un "grinch". Por decisión propia, pasaré esta "noche buena" solo. Tal vez sea un buen momento de introspección para replantear algunas cosas.

A mis padres, a mis hermanos y a mis amigos:

Feliz Navidad!

Social network MODE:OFF

El día que tuve un smartphone en mis manos descargué cuanta aplicación hubiera disponible. No solté Facebook, Twitter, WhatsApp y todas esas consumidoras aplicaciones. Consumidoras y agotadoras de mente y tiempo.

Me había acostumbrado a saludar a mi comunidad virtual por las mañanas, a tuitear cada estupidez que veía en la calle o alguna verborrea contra el transantiago. En fin, el aparato era todo menos teléfono.

Ayer mi smartphone; que desde que falló dejó de ser "smart", presentó un problema cuando intentaba cargar la batería. A decir verdad, hacía tiempo que venía fallando. La cosa es que llegué, onda "aquí te las traigo Peter", y desarmé la payasá para ver si podía hacer algo. Y claro! Aprendí a desarmarlo, a romper la carcasa y dejarlo absolutamente inutilizable...

Ahora no sé cuándo vuelva a tener uno de esos aparatos. Quizás sea bueno porque me di cuenta de que estaba absolutamente inmerso en el mundo de las redes sociales y poco o nada en las redes humanas. Esas en las que se comparten carcajadas, miradas e interminables conversaciones mirándose a los ojos.

Ayer después del show, se acercó al escenario una mujer muy guapa y me dice: "¿tienes una púa?"

Inmediatamente saqué de mi bolsillo una uñeta o "púa" y se la di. Apenas terminé de desarmar las cosas y dejarlas apiladas a un costado del escenario, bajé y me fui a la barra en busca de una cerveza. Mientras esperaba mi bebida, recorrí el local con la mirada en busca de esta española que me había dejado boquiabierto con su sensual (al menos para mí) acento. Al poco rato mi mirada, mucho más astuta que mi "smartphone", la divisó al otro lado del recinto conversando.  Cuento corto: conversamos un rato largo, compartimos una cerveza, miradas y sonrisas. Pero cuando llegó el momento de despedirse, lo primero que le pregunté era si tenía Facebook.

Pero, ¡qué wevón más pavo!...Teléfono mijo, teléfono!!! 

Me puse a pensar cuánto le cuesta a esas personas que tienen una vida paralela virtual, donde pueden cambiar su personalidad a gusto, eliminar miedos, ser galanes, señoritas, putos, putas, etc... Qué bueno es darle un nuevo valor a una mirada, a un gesto, incluso a una conversación superficial pero en vivo y en directo. Aún nos queda para ser humanos, trataré de dilatar lo más que pueda a la mutación virtual.

Social network MODE: OFF

Reivaj.

Así no más

Mi segundo intento en el mundo bloggero. Mi antiguo blog fue disaeñado para comentar actualidad referente al audio digital y su progreso. Claramente a nadie le interesó así que aquí estoy nuevamente, esta vez simplemente para hablar de la vida, de las cosas importantes y no tan importantes, de lo profano y lo divino, del amor y el odio, de estupideces y situaciones desafortunadas, de ellos, de ustedes, de nosotros...de tí, de mí.

No sé cuánto dure pero disfrutaré al máximo mi existencia como pseudo escritor.

From Hell, with Hate!

Reivaj.